Con la ajetreada temporada de gripe, es importante recordar por qué es tan importante la higiene de las manos. Mantener las manos limpias reduce la propagación de gérmenes. Puede practicar esto en casa, pero también puede hablar con su proveedor de cuidado infantil para asegurarse de que también tienen políticas de lavado de manos. Cuanto más oiga tu hijo el mensaje, más probable será que practique buenos hábitos de lavado de manos.
He aquí algunos consejos para lavarse las manos, adaptados de los Centros para el Control y la Prevención de Enfermedades (CDC):
Cuándo lavarse las manos:
- Antes, durante y después de preparar los alimentos
- Antes de comer
- Antes y después de cuidar a un enfermo
- Antes y después de tratar un corte o una herida
- Después de ir al baño
- Después de cambiar un pañal o ayudar a un niño que ha ido al baño
- Después de sonarse la nariz, toser o estornudar
- Después de tocar un animal o sus excrementos
- Después de tocar la basura
Cómo lavarse las manos:
- Mojarse las manos con agua corriente limpia (tibia o fría) y aplicar jabón.
- Anima a tu hijo a frotarse las manos por delante y por detrás, entre los dedos y debajo de las uñas.
- Frotarse las manos durante 20 segundos (un buen punto de referencia es cantar dos veces la canción "Cumpleaños feliz").
- Aclarar bien las manos
- Secarse bien las manos con una toalla limpia o al aire.
Para más información, consulte la iniciativa de los CDC sobre el lavado de manos.
