El 10 de diciembre de 2015, el presidente Obama firmó la ley "Every Student Succeeds Act" (ESSA). Esta medida reautoriza la Ley de Educación Primaria y Secundaria (ESEA), poniendo fin a un esfuerzo de ocho años para reescribir la legislación que se conocía como "Que ningún niño se quede atrás".
En general, la nueva medida bipartidista autoriza la financiación hasta el año fiscal 2020, y eliminaría el sistema federal de rendición de cuentas, el llamado Progreso Anual Adecuado, y responsabilizaría a los estados de establecer sus propios sistemas de rendición de cuentas.
La ESSA incluye numerosas disposiciones sobre educación temprana y desarrollo infantil en el Título I, así como autorizaciones oficiales para los programas Promise Neighborhoods y Full-Service Community Schools, ambos con componentes de aprendizaje temprano. Sin embargo, el logro más significativo para la primera infancia en esta legislación es la autorización del programa de Subvenciones para el Desarrollo Preescolar.
El programa de Subvenciones para el Desarrollo de la Educación Preescolar proporciona ayuda a los estados para desarrollar, actualizar o aplicar planes estratégicos, crear asociaciones con proveedores de Head Start y otras organizaciones públicas y privadas, y ofrecer a los padres el mayor número de opciones disponibles en lo que respecta a las oportunidades de educación temprana. Los estudiantes desfavorecidos y con bajos ingresos, así como los que viven en zonas rurales, serían la población prioritaria a la que se atendería en el marco de este programa. Este programa será administrado conjuntamente por los Departamentos de Educación y de Salud y Servicios Humanos y está autorizado con 250 millones de dólares anuales desde el año fiscal 2017 al 2020.
Los Estados pueden utilizar los fondos para apoyar la planificación estratégica y la aplicación de sus sistemas estatales de prestación mixta de servicios a la primera infancia, centrados en la mejora de la preparación escolar de los niños "desfavorecidos y con bajos ingresos" y en la mejora de la transición al sistema K-12. Los planes estratégicos deben abordar cómo los estados tienen la intención de utilizar los recursos con el fin de:
- Alinear y reforzar la ejecución de los programas existentes mediante un uso más eficiente de los recursos federales, estatales, locales y privados;
- Coordinar los modelos de prestación y los flujos de financiación;
- Mejorar tanto la participación como la calidad de los programas, manteniendo al mismo tiempo la disponibilidad de los servicios.
- Mejorar la elección de los padres entre los programas existentes.
Otros aspectos destacados de la ESSA son
- Creación de un nuevo programa competitivo de subvenciones para apoyar las iniciativas de alfabetización en el aprendizaje temprano
- Modificación de los requisitos del plan estatal del Título I sobre cómo se atendería a los programas de aprendizaje temprano
- Reautoriza las subvenciones de apoyo a los niños y comunidades nativos americanos, que podrán destinarse a servicios de educación temprana,
Puede consultar la legislación aquí. Los Departamentos de Educación y de Salud y Servicios Humanos publicarán en breve más información sobre la aplicación de la subvención para el desarrollo preescolar.
Comentarios de Child Care Aware of America sobre la aplicación de la ESSA (25 de mayo de 2016)
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