Child Care Aware® of America (CCAoA) sigue de cerca el presupuesto federal y el proceso de asignaciones para garantizar una financiación sólida de los programas federales para la primera infancia. La financiación actual del cuidado infantil es inadecuada, fragmentada, impredecible e insostenible. El sistema de atención infantil depende de un mosaico de fuentes de financiación que impone una carga demasiado pesada a las familias que pagan la matrícula y a los educadores que trabajan por salarios bajos, lo que crea claras desigualdades. La educación infantil de calidad es un bien público y debe valorarse como tal. Contribuye a unas familias más fuertes, a un mayor desarrollo económico y a unas comunidades más habitables. CCAoA seguirá transmitiendo este mensaje a los responsables políticos, ayudándoles a comprender que la educación infantil merece ser financiada y sostenida como el bien público que es.
En el año fiscal 24, el Congreso añadió casi 1.000 millones de dólares a la financiación de los principales programas federales de aprendizaje y atención tempranos, entre los que se incluyen:
- 8.700 millones de dólares para el programa CCDBG (Child Care and Development Block Grant), lo que supone un aumento de 725 millones con respecto al año fiscal 23.
- 12.300 millones de dólares para Head Start y Early Head Start, 275 millones más que en el ejercicio 23.
- 315 millones de dólares para la subvención de desarrollo preescolar desde el nacimiento hasta los cinco años (PDG B-5) a partir del año fiscal 23.
- 75 millones de dólares para Child Care Access Means Parents in School (CCAMPIS) - financiación nivelada con respecto al año fiscal 23
- 420 millones de dólares para las subvenciones preescolares de la Parte B de la Ley de Educación de Personas con Discapacidades (IDEA) - financiación igual a la del ejercicio 23
- 540 millones de dólares para las subvenciones de la Parte C de IDEA para bebés y niños pequeños - financiación nivelada con respecto al año fiscal 23
Aunque acogemos con satisfacción este aumento de las inversiones, sigue siendo necesario un apoyo público sólido y a largo plazo para que atención infantil asequible para las familias y garantizar que más niños tengan acceso a experiencias de aprendizaje temprano de alta calidad.
